domingo, 30 de octubre de 2011

Budas imaginados entre otras cosas...


Cuando las cosas no van demasiado bien reacciono siempre igual, pero a la vez diferente. Me da por distintas cosas.
El insomnio si es recurrente, pero las cosas que pienso son diferentes. Cuando hay un tema concreto que me trae por la calle de la amargura, masco la situación –casi siempre es un rollo mental de retroalimentación de despropósitos-, pero otras pienso en cosas que haría si tuviera ímpetu y ganas. Son cosas bonitas, no se piensen. No implico a segundas o terceras personas, sino que son propósitos de enmienda que sé sin lugar a dudas que al día siguiente se habrán escapado por el sumidero extraño de lo vigil justo antes del sueño. Invento personajes, diálogos o tramas. También ideas para cuadros, tebeos y chistes. Todo es un espejismo.
Ahora mismo, justo antes de emplitarme, siento que dormiré en seguida, pero el error volverá y aunque haya una horilla más esta noche –nos devuelven los que nos quitaron en primavera- muchas veces no me duermo porque no quiero que el mañana alcance la estancia. Ojalá el mundo siguiera eones ahí fuera, tras las cortinas, tras las persianas venecianas, tras las rejas de hierro que impiden mi huida –estaban aquí por una tienda antigua, que yo no conocí-. Quiero dormir y dormir y que mañana no sea domingo, o si lo fuese que fuera un domingo de 1982, cuando el pequeño Mameluco garabateaba folios y soñaba con los Budas gigantes. Ir a Afganistán donde una caravana me llevaría a ver esos Budas, hoy destrozados por las mismas manos que los tallaron en roca viva, la de los hombres. No son los mismos hombres, pero hombres al fin de al cabo. Es como si el yo lo pongo yo lo quito se repitiese para siempre. Pienso en las estrellas, y en el centro de la Tierra. En la evolución de las especies y en los dioses inventados que se me antojan más reales que los que nos quieren hacer pasar por auténticos. Me acuerdo de cuando fui feliz no siendo yo sólo. Reflexiono sobre todos los errores cometidos hasta llegar al día de hoy. Esta tarde estaba triste. La ansiedad me comía, pero en cuanto me pongo delante de los apuntes quiero huir de nuevo, y mi mecanismo de evasión es, nuevamente el sueño. No puedo actuar como un autómata solamente por la existencia de la voluntad. El triunfo de la voluntad es algo vedado para mí, y que sólo se me permite en extrañas ocasiones, por alineación de planetas o algo que escapa a mi humilde compresión de gordo materialista y sentimental.
Aquello que en un día es un océano, mañana puede ser un arroyo, que a su vez se puede convertir en uno de esos ríos enormes que abundan en Asia y América.
Arrojo mi ceniza a mi Ganges imaginario, creyendo que la rueda del Dharma obrará milagros sin tener que morir para ser otro. Pero enseguida me replanteo la cuestión. No quiero ser otro, quiero ser yo. Y eso es un inconveniente, claro. Si tuviera que pasar la supervisión de un operario me enviarían al desguace, al contenedor de basura orgánica o harían jabón con mi barrigón de descomunales hechuras.
Voy a ver lo que pienso hoy.
Sin duda en este post. En su falta de comentarios y en que sólo lo que pienso me hace ser real. Y los pensamientos y la realidad se dan de bruces.

Budas Gigantes, ¡venid a mí en la madrugada donde nos regalan lo horeja perdida!
O si no, mañana estudiando miraré a las resistentes moscas o a la calle, que estará desierta por ser domingo.

7 comentarios:

Diego Luis Urbano Mármol dijo...

Siempre que habla usted de la teoría de la evolución, me acuerdo del Anis del Mono.
Que bueno es.
De vez en cuando hay qye hacer excepciones en el ego nacionalista.
De todas maneras Badalona es la parte tonta y olvidada de cataluña y pa más inri la empresa pasó hace poco a manos empresariales andaluces(quiero recordar).

Mameluco dijo...

Yo solo quiero Machaquito. Independientemente de que sea de Rute o de Filipinas.

Esa etiqueta es el recuerdo de la incomprensión del genio, del chiste decimonónico y la falta de argumentos. Me alegro de que haya durado hasta el día de hoy.

Anónimo dijo...

que triste triste me puso leer esto miguel
ya se q solo muy pocas personas pueden sacarte de ese estado pero yo tambien soñaba con los budas tallados en la montaña y aun sueño con afganistan............ quien sabe si hace frio tal vez.....no? ;)
silvia

Cristina dijo...

Yo te sigo fielmente aunque no haga comentarios, porque sería como decir amén cada semana (menos con lo de hacer jabón con tu barriga; nunca he entendido como se puede hacer jabón con grasa)

Cris

Mameluco dijo...

Silvia no escribo para poner triste a nadie. Escribo cosas así por exorcismo personal, para ponerme contento yo.

Cristina para hacer jabón hace falta una grasa, siempre. Lo que pasa es que suele ser vegetal (aceite de cualquier cosa). Lo chungo es utilizar grasa humana. Sólo lo han hecho en la historia los caníbales por fetichismo.
Pese a lo que se cuente, los nazis nunca hicieron jabón con los judíos -no era muy rentable la cosa, aunque suene crudo decirlo así-.

Comentar es bueno, pero claro, siempre es optativo. Igual que leerme. Lo que hace usted me parece bien. Los lectores siempre son bienvenidos. SIEMPRE.

Anónimo dijo...

Ya, si yo también soy de pueblo y he visto hacer jabón en cubos con sebo y sosa... lo que, a pesar de la química, me sigue pareciendo una incongruencia, asumible, por eso, como casi todas.

Es difícil comentar, porque tus posts se mueven en un universo tan personal que casi por corrección no opinas... no por eso dejas de sentirte implicado en muchos; recuerdo que me gustó especialmente el de Grava.

Cris

Mameluco dijo...

Bueno, el de Grava era un relato, nada relacionado con mi vida. (menos mal, jajaja)

Si queréis comentar comentáis y si no os apetece pues no. Lo que si agradezco es el que me leáis.

 
Add to Technorati Favorites Creative Commons License
Mameluco´s Blog by Miguel Morales Merino is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-No comercial 2.5 España License.