Si no han visto el desenlace de la 4ª Temporada de House y leen este post se lo puedo chafar, así que si les interesa, no lo lean...
¿Qué llegue o que no llegue? Es difícil saberlo. No quiero hacer comparaciones odiosas, pero es como un pequeño corredor de la muerte.
Las reacciones a las cuentas atrás son en mí adversas, y siempre desafortunadas. Rememoran esperas tensas, amargas noches de agónicas horas en vigilia esperando el inexorable canto de los pájaros que son preludio de amaneceres de estudio atolondrado. La huella, el rastro hondo en mis neuronas de los exámenes han licuado poco a poco mi débil materia gris a base de nervios y lágrimas.
Si, me pongo melodramático. En realidad soy un héroe de opereta decimonónica venido a menos en un mundo vacío, sin gracia, sin chichipirri. Ustedes me dirán que huela las nubes y que la vida es maravillosa. Vale, admito pulpo como animal de compañía y que hay un Dios que todo lo ve montado en una nube como Son Goku. Pero eso son vueltas que le doy yo a mi cabeza, lo sé, lo sé.
El mundo es bello. La vida es maravillosa. La muerte es connatural a la vida. Hoy se ha muerto zorra implacable en House. Amber. ¡Que gran mujer! Me ha dado más lástima que cuando se murió Chanquete. Pero así es la vida. Pero cuando uno sufre, por mucho que los demás crean que es inventado, la sensación de nausea y desespero está ahí. La gente dice que siempre hay que buscar las cosas positivas. A continuación te dicen que te compares con la gente que se muere de hambre o tiene cáncer. ¿No es una incongruencia? Si se busca el positivismo hay que buscar modelos positivos de gente feliz, lo cual puede aumentar algunos enteros la frustración que sientes, y no por envidia, que podría ser – no es mi caso, porque tengo muchos pecados, pero no ese-, sino porque te planteas tu vida y descubres que no eres nada. Nada. Siempre tuve la sensación desde que era un preadolescente que no acabaría muy bien. No me veía cualificado para esta vida acelerada. A la larga veo que no era tan tonto. Mis sobresalientes no eran de chiripa (de estudiar no eran, desde luego). Creo que ahora soy menos apto que el teen que se sentía levemente superior. Hoy me siento bastante inferior. Cada vez que me siento delante de unos apuntes me dan ganas de quemarme a lo bonzo, pero es que no hay otra salida. No quiero que me exploten en una empresa, y no puedo desarrollarme por otros lados porque no se como hacerlo, y creo que no tengo el talento suficiente. Me he demostrado a mi mismo que a la larga puedo sacarme algo estudiando, así que, aunque acabe loco entero – ahora solo estoy medio loco- ese es mi plan. Plan suicida. Kamikaze rules.
4 comentarios:
sabia que te impactaria este ultimo capitulo de house. a mi tb y anoche mas aun que era en español...jejeje
bueno xao xao
Pues si, Periquín, si que me impactó.
Ya no hay House hasta Octubre... Mecachis...
mmm... todo el mundo enganchado con House, y yo que ni si quiera veo la tele... seré rara?
Por no estar enganchada a House no. Conozco a mucha gente que no lo está y que hasta odia la serie. Por no ver la tele, si eres rara. Pero recuerda Vane, que ser rara no es malo.
Lo malo es ser normal.
Yo sin tele he demostrado que podría vivir, pero me resulta más agradable con tele. Ya sabes, los rayos catódicos invadieron mis neuronas de pequeño, haciéndome adictos a ella para los restos.
Pero hay que saber ver la tele.
Eso si. Puedes ver de todo, pero con la distancia justa (no en metros, si en propósitos).
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