O Fortuna,
velut Luna
statu variabilis,
semper crescis
aut decrescis;
vita detestabilis
nunc obdurat
et tunc curat
ludo mentis aciem,
egestatem,
potestamem
dissolvit ut glaciem.
Traducción ==> ici (Porque no todos sabemos lenguas muertas)
Hoja en blanco. Domingo en ciernes. Ciclos que se cierran. Espacios que se abren.
Todo ello contenido en la mente del artista. Y digo artista no como persona que realiza labores artísticas, sino a la alocución del pueblo llano ¿Qué pasa, artista? Los planos concéntricos y el universo que se separa. Nada nuevo bajo los millones de soles. Hoy empezará de nuevo la rutina de estudio en la azotea. La he adelantado un día. Iba a ser el lunes, y puede que sea así, pero en mi mente se ha corrido un día la fecha en el casillero. Mi imaginación hace la comparación con una bola en la ruleta. Ha caído en el 0, gana la banca. La banca es mi posibilidad de aprobar. La banca aquí es raquítica, escuchimizada, está en las últimas, como un tísica de folletín decimonónico. La banca controla a uno que no es así. Al barbudo rollizo, gordo cuasi mórbido, al que la Diosa Fortuna solo toco en ocasiones muy contadas, con sus delicados dedos impregnados de pavesas del destino.
Los días pasan. Otra frase que se repite, una y otra vez en mis escritos, llenos de repetición. Encasquillamientos de la mente. Y es que es así. No deja de ser así. Los días pasan. Eres más consciente cuando esperas algo. Como deseo esperar solo la muerte, y verla lejana. La incertidumbre y la espera me ponen nervioso. Al contrario de mucha gente, soy un persona puntual y llego a los sitios con 10 minutos de adelanto. Y no me importa esperar si he quedado para ir al cine o para ir de tapas, pero esperar exámenes o cosas así, me trae por la calle de la amargura. La misma espera me impide progresar en lo que hago. Y más si es un trabajo intelectual. Estudiar lo es. Conocimientos que has fijado y que te recuerdan lo mal que lo pasaste cuando lo tuviste que aprender en el pasado y enfrentarte a los exámenes. Y hoy otra vez en esa tesitura. Se preguntarán ¿este tío es masoquista? Tengo un punto, si, pero también es que no duraría ni dos días en la empresa privada y quiero tranquilidad. Y eso solo se consigue opositando, que es gerundio.
2 comentarios:
click, click, click
el español sí que está muerto
se lo están cargando una panda de niñatos que desprecian sus orígenes y una tradición que un día fue el asombro, luz y envidia del mundo
lo están amortajando profesores de instituto que, con los brazos bajados, no penalizan escribir "burro" con v en un examen de lengua porque, en aras de la producitividad, no le pasarían de curso el número suficiente de niños.
joder, qué alto hay que subir para caer tan bajo...
oh, fortuna, velut luna...
Bueno, señor Lobech, no se ponga así.
Yo en mi programación he dado a eso de la lengua la misma importancia que a lo de los contenidos científicos, y mire que soy un radical de la ciencia. Y además que lo he indicado así.
Objetivos generales de etapa.
En la asignatura de CTMA se contemplan con especial atención tal tal tal y tal, pero una de la que considero más importante es el uso de la lengua castellana correctamente.
Si un alumno no sabe expresar una idea, es que no tiene esa idea en mente (sic)
Las faltas no son tan importantes, bajo mi punto de vista, porque son más arbitrarias (aunque yo no las cometa, y tampoco las vaya a tolerar). La expresión es cargarse el castellano, amigo Lobech.
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